25 de diciembre, día de Navidad. Preciosa fecha para pasar con la gente que más importancia tiene en nuestras vidas.
Para algunos, el día de hoy tiene una gran significancia religiosa, Puer natus est nobis. Para otros, tan sólo es una oportunidad para poder celebrar el amor, la familia y la importancia de las pequeñas cosas, de los buenos momentos. O todo a la vez.
Sevilla también celebra la Navidad. Este año, por fin, por todo lo alto, y con los niños como protagonistas. Con sus dibujos navideños, en realidad, que se agigantan cada noche sobre la fachada del Ayuntamiento. Los dibujos desfilan a ritmo de villancicos, y las familias acuden a verlo tras la puesta de sol, bonito espectáculo de luz, música, color e ilusiones infantiles.
Y Sevilla, orgullosa de sí misma, aprovecha la ocasión y se rinde homenaje en la sede de su poder terreno con unas proyecciones que cuentan su historia, nuestra historia. Porque con su origen legendario, sus vivencias, sus personajes y sus leyendas, la vida de Sevilla se asemeja quizás más a un cuento. O a una amada inmortal (parafraseando a Beethoven, por supuesto), siempre joven y anciana, tal y como la retratara Santiago Montoto en su magna obra al titularla no "Historia" sino Biografía.
Así que, desde Sevilla, os deseamos una muy feliz Navidad.