La ciudad está de cumpleaños: El 21 de abril del año 753 a.C. Rómulo fundó su ciudad en la colina del Palatino, y tal efeméride no puede pasar desapercibida. Roma ha celebrado su legendario nacimiento con conferencias, conciertos y diversos actos repartidos en una semana. Vamos a intentar contar algunos de ellos:
La víspera organizó un curioso concierto en la plaza de San Ignacio en el que cuatro oradores iban alternándose para narrar la historia de la ciudad desde sus orígenes míticos hasta el presente. Llama la atención la selección de los puntos más importantes de su historia, eligiendo la fundación, la República hasta Augusto, pasando de ahí a los orígenes del cristianismo y, con un salto abismal de más de 1500 años, al proceso de unificación de 1861, para acabar con el nacimiento de la Unión Europea. Ni una mención al esplendor romano en la Edad Moderna.
Estos oradores estaban acompañados por la banda del Ejército y el coro polifónico de la Asociación Cultural Romanae, formada esta última por voces blancas (no por niños, sino por canas). Un detalle a destacar es el color de las fundas de las partituras del coro, rojas, blancas y verdes, configurando en la visión de conjunto la bandera italiana. Tocaron marchas militares, el Va pensiero, Arrivederci Roma y el Himno de la Alegría, entre otras composiciones.
El escenario no podía ser más propicio, uno de los grandes logros urbanísticos de la ciudad. El coro se repartía por los peldaños de la escalinata de la iglesia y la banda, bajo ellos, como en una orchestra, dejando el resto de la plaza para las sillas del público.
